Carácter
¿Qué tal con los niños?
Es un perro con un carácter jovial. Esto hará que siempre esté preparado para el juego, que junto a su fuerte y pequeño cuerpo lo hacen ser ideal para los niños. Siempre deberemos enseñar a los niños a tratarlos con el mayor cuidado posible, ya que deben entender que a pesar de ser resistente, también sufren con posibles brusquedades. Enseguida se harán amigos inseparables y compañeros de vida.
¿Aprenden rápido?
Es una raza extremadamente inteligente, por lo que posee gran rapidez de aprendizaje. Con esto nos referimos tanto a la asimilación de las pautas de convivencia (rutinas de salida, hacer sus necesidades donde le pedimos, saber cuáles son los límites dentro del domicilio) y a la capacidad para asumir las diferentes habilidades que se le propongan. Con los conocimientos básicos, dedicación y el premio correcto que lo motive no tiene límites. Cada perro puede sentirse atraído e interesado por diferentes premios, alimenticios (snack caninos, salchichas, hígado) o lúdicos (pelotas, nudos, cuerdas, peluches, pieles). Encuentra el que más le guste y juntos conseguiréis lo que te propongas.
¿Es un buen compañero para el deporte?
“¿Deporte? Venga vamos!! Ni se te ocurra dejarme en casa” Eso pensará tú Jack cuando te vea preparándote para salir a correr, a dar un largo paseo o por qué no a una sesión de agility. Siempre estará dispuesto a hacer cosas, y salir a quemar energía. No te dejes engañar por su tamaño, será muy resistente cuando alcance la edad adulta. Cuando son cachorros y están en crecimiento deberemos medir siempre más el ejercicio físico al que se les somete, cuidando así sus articulaciones. Será mejor dar paseos más tranquilos, juegos con pelota y poco a poco cuando vaya madurando se podrá ir intensificando la carga de ejercicio. Otra cosa a tener en cuenta es la temperatura, no tanto por el frío, sino por el calor, ya que tenemos que pensar que cuando el sol aprieta, ellos van muy pegados al suelo y la temperatura de éste es muy alta.
Yo soy de paseo y café en una terracita ¿se adaptará?
¿Y a quien no le gusta eso? El Jack Russell es camaleónico, y esto lo hace capaz de adaptarse a cualquier situación. Siempre debemos saber que cualquier perro sea de la raza que sea, necesitará un mínimo de ejercicio moderado y unas rutinas de paseos para su buen desarrollo físico y mental, que puede ser variable en función de cada perro. Esto quiere decir que no necesariamente tenemos que salir a correr con él, pero que sí necesitarán de un ejercicio medio para su completa felicidad. Ellos disfrutan como nadie de la compañía de su dueño, y podrán acompañarte a cualquier lado que necesites actuando tranquilos, resultado del equilibrio mental que tienen, siempre que se le realice su correcta sociabilización desde cachorro. Por eso es importante acostumbrar al perro desde edades tempranas a lo que se le va a pedir de adulto.
¿Es verdad que son cazadores?
Rotundamente sí. La raza fue creada para esto y su utilidad durante la mayor parte de su existencia ha sido esa. Para nosotros es algo muy importante y que valoramos, ya que es una de las cualidades típicas de la raza, aunque en nuestro caso no practicamos la caza. El Jack Russell tiene un irremediable instinto cazador que normalmente si no se le fomenta permanece aletargado en su interior, aunque nunca es tarde para que esté se despierte y veamos a un verdadero terrier. Por lo que deberemos prestar atención si existe la posibilidad de la existencia de un estímulo que pueda ser considerado por él, como una posible presa, lo más común en una ciudad sería encontrar algún gato durante el paseo.
¿Como se comportan con otros perros?
¡Genial! Es una raza de jauría, acostumbrada a vivir en grupo, por lo que son en su mayoría perros muy sociables, divertidos, aunque un poco intensos en el juego. Deberemos educar y sociabilizar a nuestro jack russell para que no sea invasivo en el juego, evitando así problemas con otros perros. Este proceso de educación comienza desde que comienzan a andar, con una impronta correcta con su madre, hermanos y el resto de perros. Por eso es tan importante que el cachorro no llegue a su nuevo hogar antes de las 9 semanas. Aún así esto no asegura nada y su dueño deberá asegurarse de proporcionar al cachorro los estímulos y las claves necesarias para desarrollarse como un perro equilibrado.
¿Se lleva bien con otros animales domésticos?
Sin problema, pero con matices. Siempre y cuando el perro haya convivido con el animal desde cachorro, no debemos tener ningún problema. En caso de ser una especie nueva que llega a casa con el perro ya adulto, observar bien su comportamiento, y sobre todo al principio no dejarlos juntos sin vigilancia.
